The A List, tan mala e irónicamente popular.

¿De qué trata?


Un grupo de adolescentes estereotipados asisten a un campamento de verano en una isla donde comienzan a suceder cosas extrañas.

Existen infinidad de series y películas sobre islas misteriosas donde los personajes tienen que sobrevivir y coexistir, Fantasy Island, LOST, Harper’s Island, de hecho, ya se ha estrenado también The I-Land pero hablaremos de ella después. Y dentro de todas las series de islas que han existido, creo que The A List, es la peor de todas, pero Irónicamente también es una de las más populares.

La serie británica tiene un lamentable elenco que parece reclutado de los peores capítulos de la Rosa de Guadalupe, cada personaje es un cliché del cliché que poco se esfuerza por convencernos de su papel, incluso los protagonistas.  La trama es sencilla, no se esfuerzan en crear una atmósfera, te llenan de misterio y giros de tuerca tan burdos que parece un guión escrito por o para niños, como aquellos viejos capítulos de Goosebumps.

Entonces… ¿Qué es lo que la hace tan popular?

Precisamente eso, la misma fórmula de Goosebumps, quizá ustedes estén muy jóvenes para entender de lo que hablo, pero cuando su viejo tío NoSoyEllos, era menos viejo, pasaba una serie de capítulos concluyentes donde algún niño pasaba por un hecho sobrenatural, misterioso o de terror, donde incluso un muñeco de ventrílocuo actuaba mejor que los protagonistas de The A List.

La fórmula funcionaba porque eran capítulos cortos, que necesitaban terminar en el mismo episodio, y al ser una serie para niños, los huecos argumentales no eran algo tan malo, solo querías vivir el suspenso y saber en que terminaba.

Pasa lo mismo con The A List, la serie te lleva misterio tras misterio esperando una conclusión, aunque en realidad no sea nada interesante, sientes la necesidad de saber ¿Por qué diablos un árbol tiene un diente saliendo de sus ramas o ¿Por qué alguien que parece suicidarse no lo hizo en realidad?  Lo cierto es que esas acciones y otras tantas, ni siquiera van tomadas de la mano con la trama, están ahí solo para crear misterio.

Y eso es lo que nos atrapa, el misterio, cualquiera que sea, de hecho una de las cosas que mantuvo a la audiencia pegada a sus asientos mirando LOST a pesar de que se había convertido en un absurdo programa de televisión, era el misterio.

The A List es una serie ligera, no te hará pensar ni sentir alguna emoción más allá que la simple curiosidad, pero basta con eso para mantenerte atento, a final de cuenta la curiosidad mato al gato y mantuvo siempre al espectador pegado a la pantalla. No hay mucho bueno que decir de la serie, sencillamente es un producto fabricado para atrapar una audiencia joven, y que quedará olvidado en unos años.